Un padre exigió al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pensión para su hijo después de que personal médico de la clínica de Los Mochis, Sinaloa, se diera a la tarea de cometer una presunta negligencia médica durante su nacimiento y lo dejó discapacitado de por parte vida.
José Alfredo Apodaca Álvarez tiene 41 años y un retraso mental en grado severo.
Su daño cerebral lo causó la mala atención durante el parto y que no lloró ni respiró inmediatamente al nacer, según un diagnóstico emitido en el hospital del niño en la Ciudad de México, en abril de 1977, cuando José Alfredo tenía 7 meses de edad.
Cuando tenía él 40 años, fue cuando me informan y pusimos el grito en el cielo. Cuánto tiempo batallando. Que le den una pensión justa que le permita vivir. Que le permita alimentarse” insistió el señor Apodaca.
El Seguro Social pensionó a José Alfredo con 235 pesos mensuales, equivalente al 10% de la pensión que le dieron a su papá.
En una misiva enviada al director general de IMSS, don Xavier considera injusta la cantidad que le dan a su hijo ya que el daño causado por la presunta negligencia durante el parto ha tenido un alto costo en la salud y alimentación de José Alfredo.
Reyna Miriam Rubio, jefa del departamento de supervisión de la delegación del IMSS en Sinaloa, indica que las pensiones otorgadas a don Xavier y José Alfredo se otorgaron conforme a las semanas cotizadas ya que así lo marca la ley del Seguro Social.
El abogado Marco Antonio Garfias, quien ha litigado casos contra el IMSS, expone que a pesar de que han pasado 41 años, don Xavier Apodaca, quien se hizo cargo absoluto de José Alfredo a los 13 años de edad, tras separarse de su esposa, puede buscar por la vía jurídica que el IMSS se haga responsable del daño causado.
Xavier Apodaca Fierro, asegura que solo busca justicia y que su hijo pueda tener una pensión digna que le permita vivir, incluso cuando él le falte.
